Diferenciando la prueba de la tentación
“Que nadie diga cuando es tentado: «Soy tentado por Dios». Porque Dios no puede ser tentado por el mal y Él mismo no tienta a nadie.” Santiago 1:13 NBLA ¿Si […]
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Alertas todo el tiempo frente a la tentación Un Dia A la Vez
“Sino que cada uno es tentado cuando es llevado y seducido por su propia pasión. Después, cuando la pasión ha concebido, da a luz el pecado; y cuando el pecado es consumado, engendra la muerte.”
Santiago 1:14-15 NBLA
Hace un tiempo en un canal de ciencia había una sección llamada: “¿Cómo lo hacen?” Me encantaba porque mostraba el proceso de elaboración de muchas de las cosas que usamos a diario, desde las más complejas como una computadora hasta las más insignificantes como las agujas. Así que, me declaro fan de todo aquello que muestre lo que hay detrás de las cosas.
Debe ser por eso que este pasaje es de los favoritos en toda la biblia y uno de los que más rápido memoricé, es uno que nos muestra el proceso detallado de la concepción del pecado, de cómo se produce.
Creo que este pasaje es oro porque nos muestra por dentro el enemigo que enfrentamos a diario y entre más lo conocemos, más eficazmente podemos hacerle frente.
El pecado No es algo que surge espontáneamente, por el contrario, es algo que se va desarrollando en etapas:
Primero aparece la tentación, es decir, el estímulo externo, algo que generalmente llama nuestra atención y que generalmente va contra la voluntad de Dios.
Luego de eso aparece la respuesta, el interior del hombre es seducido y atraído por esa tentación, los ojos se llenan de deseo y como si estuviéramos atados a una cuerda comienza a llevarnos hacia dicha tentación.
Después de eso aparece el pecado consumado, noté que ser tentado en sí mismo no es un pecado consumado todavía, alguien puede simplemente apartar la cabeza, cambiar el canal o cerrar la computadora, pero cuando la tentación gana, el pecado es concebido.
Y finalmente, una vez el pecado es concebido, su consecuencia es muerte. En el sentido de que es su castigo, pero también en el sentido de ser algo que nos separa de Dios.
Si somos más conscientes de este proceso, pudiéramos ser más sagaces a la hora de enfrentar el pecado. Rendirnos ante la tentación no es la única salida que tenemos en frente. Siempre podemos correr al Señor, pero también correr de cualquier lugar o situación que sea una puerta para concebir el pecado en nuestras vidas.
Esto debe llamarnos a estar alertas en todo tiempo y velar con diligencia.
Autor
Un Dia A la Vez
Un día a la vez es un devocional diario de la palabra de Dios y centrado en el Evangelio, en la voz del pastor Jacobis Aldana. Este es un programa de Iglesia Bíblica Soberana Gracia. Santa Marta, Colombia.
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