que tu fe sea evidente por tus obras
“¿De qué sirve, hermanos míos, si alguien dice que tiene fe, pero no tiene obras? ¿Acaso puede esa fe salvarlo?” Santiago 2:14 NBLA Me encanta el lenguaje de Santiago, directo […]
chevron_left
-
play_arrow
El perdón del pecado y la ayuda para no recaer Un Dia A la Vez
-
play_arrow
Evangelistas de tiempo completo Un Dia A la Vez
-
play_arrow
Gracias a Dios por los pastores, pero gracias a Dios por Jesucristo Un Dia A la Vez
-
play_arrow
¿Por qué hay maldad en el mundo? Un Dia A la Vez
-
play_arrow
Desconocido de los hombres pero conocido por Dios Un Dia A la Vez
-
play_arrow
La verdadera historia de David y Goliat Un Dia A la Vez
-
play_arrow
Dios usa un mensaje sencillo para producir una obra grandiosa Un Dia A la Vez
-
play_arrow
Dios usa nuestros males menores para resolver nuestro mal mayor Un Dia A la Vez
-
play_arrow
No matarás Un Dia A la Vez
No matarás
Éxodo 20:13
¿Cómo manda Dios a amar al prójimo? Dando valor a la vida porque Dios es quién da la vida y la quita.
Este es tal vez uno de los mandamientos más naturales de toda la ley. Me refiero al hecho de que en el mismo diseño del ser humano viene configurado el respeto por la vida de su semejante, no tenemos que instruir a un niño y decirle que no debe matar a otro, es algo que incluso en nuestra caída naturaleza está anclado como moralmente bueno.
Este mandamiento es una prohibición expresa de no cometer homicidio. Por supuesto no es un mandato definitivo acerca de no matar: Por ejemplo, este mandato no prohibe matar animales y tampoco contempla la muerte por defensa propia o la defensa militar misma, las cuales están amparadas como una excepción en la Palabra de dios, pero tiempo nos faltaría para abordar esto de manera más amplica.
La razón de ser de este mandamiento está en dios mismo. Es prohibido arrebatar la vida a otra persona porque cada ser humano es portador de la imagen de Dios, por lo que atentar contra otro ser humano es un atentado directo contra Dios. Además de eso, el único soberano sobre la vida es aquel que la da, por lo que el homicidio es una aberrante usurpación del señorío Divino,
Pero este mandato va más allá de la prohibición inmediata, en palabras de Jesús:
Han oído que a nuestros antepasados se les dijo: “No asesines. Si cometes asesinato quedarás sujeto a juicio”. 22Pero yo digo: aun si te enojas con alguien, ¡quedarás sujeto a juicio! Si llamas a alguien idiota, corres peligro de que te lleven ante el tribunal; y si maldices a alguien, corres peligro de caer en los fuegos del infierno.
Esto es importante, no matar no solo es acerca de respetar la vida física, sino de no atentar contra la dignidad de otra persona. Eso es mucho más de lo que pudiérmos esperar. Lo que las palabras de Jesús sugieren es que la única diferencia entre alguien que está en la carcel pagando por homicidio y alguien que guarda odio profundo en su corazón contra alguien que lo lleva a degradar su imagen y desear su muerte, es que uno tuvo en su contra el tener un arma en la mano, pero la culpa, delante de Dios es la misma.
Si albergas odio en tu corazón contra alguien, si destrulles con tus palabras su imaagen, si no puedes siquiera hablarle pacificamente, entonces eres culpable de homicidio. En efecto, los mandamientos no son solo reglas, se trata de nuestro corazón y allí todos quedamos cautivos.
Así que la proxima vez que quieras referirte acerca de ti mismo como alguien que nunca ha matado a nadie, asegúrate de estar pensando en todo lo que este mandamiento implica.
Pero hay gracia y perdón suficiente en Jesús para amar aun a aquellos que creemos que es imposible amar, todo esto viene del Evangelio, pues Jesús mismo murió por sus enemigos para que ellos fueran llamados ahora Hijos de Dios.
Para meditar y profundizar: Rom 12: 9-21
Autor
Un Dia A la Vez
Un día a la vez es un devocional diario de la palabra de Dios y centrado en el Evangelio, en la voz del pastor Jacobis Aldana. Este es un programa de Iglesia Bíblica Soberana Gracia. Santa Marta, Colombia.
Comentarios (0)